
Mi primer trío MHM con mi prima
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Hola manzanita , quiero contarles mi experiencia 😊... Mi primer trío MHM
Soy casada y el sexo con mi esposo siempre ha sido muy rico. Somos muy abiertos al placer y a nuevas posibilidades; siempre hablamos del tema y nos encanta fantasear. En una de esas charlas me dijo que tenía una fantasía: un trío 😱. En ese momento no lo tomé muy bien y no lo veía viable, pues el hecho de que otra mujer lo tocara frente a mí me parecía inaceptable.
Sin embargo, con el pasar de los días volvimos a tocar el tema y empezamos a imaginar, vía telefónica, cómo sería esa experiencia (él estaba de viaje en ese momento). Mientras hablábamos de esa fantasía, me encantó lo que estaba sintiendo: me trasladé a ese momento, imaginé cada palabra que decíamos y podía sentir cómo mis cucos se mojaban y mi vagina se dilataba poco a poco. Tenía unas ganas locas de cumplir esa fantasía y dar rienda suelta a esos deseos compartidos.
Cabe aclarar que nunca había besado a otra mujer ni se me había pasado por la cabeza algo parecido. Ese mismo día, después de hablarlo, me masturbé y me vine delicioso, ayudándome con mis juguetes e imaginando ese trío.
Decidimos llevarlo a cabo y hacerlo realidad. Como mujer puse unas reglas, y una de ellas era que yo escogía a la mujer. Él aceptó, pero ahora el problema era: ¿a quién se lo iba a proponer? 🙈 No era algo fácil de decir…
En ese momento pensé en una prima con la que tengo mucha confianza y que además me parecía bonita. Sentía que ella podía aceptar la propuesta. Claro que en mi cabeza rondaban mil pensamientos diciéndome que no lo hiciera… pero pudo más la curiosidad y el deseo. Solo imaginarme chupándole las tetas a otra mujer me daba un morbo tremendo.
La invité a comer y le dije que tenía una propuesta que hacerle. Le di muchas vueltas, con nervios, sintiéndome a la vez excitada de hablarle del tema. Ella entendió súper rápido y me dijo que si era un trío con mi esposo, ¡sí! Que si yo estaba segura, ella no tenía problema. Que le parecía rico y que, además, no era la primera vez para ella. ¡Ya era casi un hecho!
La llevé a comprar ropa interior, un vestido de baño y hasta le mandé a arreglar las uñas. Mejor dicho, quería que todo fuera inolvidable, y así fue. Mi esposo me dio el dinero para esos detalles, ella quedó feliz y cuadramos la cita para ese fin de semana.
Nos quedamos desde el sábado en la tarde hasta el domingo a mediodía. Mi esposo compró whisky, pasabocas y todo lo necesario. El lugar era un hotel con piscina privada en la habitación. Estábamos nerviosos, así que decidimos meternos a la piscina con música y unos traguitos para romper el hielo. Teníamos todo el tiempo del mundo.
Después de unos minutos él dijo que quería vernos besándonos. En mi mente pensé: bueno, empecemos. Ella se me acercó, me agarró la cara suavemente y nos empezamos a besar. Sentí delicioso, una excitación nueva que me empapó al instante. La vista del lugar era linda, la música perfecta y la compañía mejor aún.
Después de ese beso ellos dos también se besaron, y para mi sorpresa no me incomodó. Al contrario, me excitó aún más. Salimos de la piscina y empezamos a hacerle sexo oral a mi esposo, las dos al tiempo. Ese hombre estaba loco de placer, nos agarraba el cabello duro, nos provocaba arcadas… y entre nosotras también nos besábamos mientras lo mamábamos. Su verga estaba durísima y deliciosa.
Fuimos al cuarto y prácticamente él nos iba guiando. Les confieso que mientras escribo esto me mojo. Pasó de todo: yo le chupaba las tetas a ella y ella a mí, y era una delicia. En un momento la acostamos boca arriba con las piernas abiertas; mientras yo la besaba y chupaba su cuello y sus tetas, mi esposo le devoraba la chocha. Ella gemía de placer. Luego me acosté yo, ella me chupaba y al mismo tiempo él la penetraba. Todo era fuego, todo era morbo.
Hicimos muchas posiciones. Ella me preguntaba si me gustaba, y yo solo podía decir que sí, que estaba deliciosa. Disfruté de sus fluidos, de su cuerpo, y más aún de ver la cara de mi esposo gozando su fantasía hecha realidad.
Después de unas dos horas de sexo intenso descansamos, pedimos comida y nos quedamos a dormir. Al día siguiente desayunamos, nos bañamos y seguimos con traguitos suaves. Mientras nos asoleábamos, él nos untaba bronceador y nos metía los dedos por debajo del panty, jugando con el culo y la chocha de ambas. Estábamos mojadísimas.
En la piscina la sentó en el borde y empezó a chuparle la chocha mientras yo miraba. Luego le quitó el panty y le chupó el culo, que a él tanto le encanta. Más tarde entramos al cuarto tipo turco que había junto a la piscina (sin encenderlo) y allí nos pusimos a mamarle con todas las ganas, tan duro que ella terminó vomitando del esfuerzo. Eso no lo detuvo; simplemente limpiamos y seguimos en la habitación con más sexo, ya con más confianza.
Fue una de las mejores experiencias de mi vida. Tuve orgasmos deliciosos, lo disfruté al máximo y, después de eso, hemos tenido otros encuentros. Ya se los contaré más adelante.
Espero disfruten este pequeño relato.
4 comentarios
Quiero hacer un trío con mi novia y una mujer que ojalá nunca haya vivido esa experiencia
Me gusto mucho esta historia
Me fui a una película NOPOR de esas que te mojan totalmente, disfrute cada parte de tú experiencia y me hice en esas escenas jajjjaja
Ufffffff tremenda exitada la que me pegó este relato,me lo imaginé como si era yo mismo disfrutando de dos mujeres dándoles todo el.placer del mundo,me quedo con esa imaginación por qué se que eso jamás pasará con migo y mucho menos con mi mujer ,un aces de lompropuse y no le gusto para nada 🤭Pero bueno morí en el intento
Debe de ser algo increible y sorprendente gracias por tu relato algo que siempre equerido aser