Juguetes sexuales: mitos y realidades
Publicado por manzana erótika en
Son muchos los comentarios que existen frente a estos objetos, pero ¿qué de tanto es verdad? Aquí te contamos algunas cosas que debes saber para que no caigas en tabúes ni prestes cuidado a los rumores.
Si algo es cierto y lo afirman los sexólogos es que los juguetes sexuales son algo muy positivo en la vida sexual de las personas. Sin embargo, las creencias y prejuicios existentes en la sociedad han demonizado estos productos. ¡Pero no más! Es momento derribar esos mitos y tabúes que existen para poder disfrutar de una vida sexual diversa.
Muchas personas concuerdan al asegurar que los juguetes sexuales no generan ningún efecto negativo en tu vida sexual, por el contrario, aportar grandes beneficios a ti y a tu pareja. Y eso de que sustituyen la vía natural para disfrutar del sexo o que los vibradores son solo objetos exclusivos de la industria pornográfica, son solo mitos. Aquí te contamos:
¿Qué mitos existen?
- Las personas pervertidas son las únicas que los usan: El sexo en general ya es un tabú en la sociedad, por eso, cualquier tema que se relacione con esta práctica genera rechazo. Sin embargo, las personas que usan estos juguetes lo hacen porque les gusta experimentar nuevas sensaciones, porque se atreven a probar cosas nuevas en su vida sexual. ¿Cuál es el problema?
- La salud se ve afectada con el uso de juguetes sexuales: La creación de primer vibrador es prueba de los beneficios que tiene el uso de estos objetos, pues no solo generan placer sexual, sino que ayudan a controlar dolores, previenen la irritabilidad y calman la ansiedad. Además, los productos que existen en el mercado están elaborados con materiales seguros y solo dependerá de la higiene y el cuidado que tenga la persona que los use.
- Los vibradores son un consuelo por no tener pareja: ¡Claro que no! Hasta las parejas los usan como complemento en el acto sexual. Si estos juguetes son adquiridos por personas solteras es porque disfrutan del acto de la masturbación y son consientes de lo positivo de esta practica en los seres humanos. Además, en el caso de los vibradores, son herramienta que ayudan a generar más placer durante la masturbación.
- Solo lo usan los homosexuales: Los seres humanos viven la sexualidad como quieran. Cada uno usa los elementos que les parezcan apropiados para sentirse bien, por ende, no se debe limitar el uso de estos objetos a una parte de la sociedad. ¡Vive y deja vivir!
- Las mujeres que solo pueden tener un orgasmo con un vibrador tienen algún problema: Esto solo indica que hay mujeres que tienen otros puntos erógenos, que no necesariamente son en la vagina. Si se trata de estimulación, partes como el clítoris, los hombros, los senos, incluso los hombros, pueden ser partes claves para la excitación. El éxito está en indicarle a tu pareja cómo logras el orgasmo para que él también llegue a ese punto.
Hablemos de las verdades:
- Todos puedes usar juguetes sexuales: Si estás soltero o con pareja puedes hacer uso de estos objetos, pues son herramientas que te permitirán innovar en el acto sexual. No por estar acompañado debes dejar de disfrutar de tu vida sexual.
- Los juguetes ayudan a superar la vergüenza: ¡Total! Y no solo eso, también permiten que las personas que les gusta disfrutar de su sexualidad conozcan más su cuerpo, lo exploren y reconozcan lo que les gusta o no. A veces el sexo tradicional no es suficiente para cumplir aquellas fantasías sexuales.
- Los juguetes eróticos despiertan la vida sexual: El uso de estos elementos se ha vuelto común tanto en hombres como mujeres, pues no solo ayudan a reconocer lo que te gusta o no en tu vida sexualidad, sino que también te dan un empujón en esta etapa de la vida.
- No generan pérdida de sensibilidad en el clítoris: El material con el que está elaborado el juguete sexual ayuda a evitar reacciones negativas en el cuerpo. Además, los sexólogos aseguran que el uso de estos objetos ayuda a una mayor excitación en el caso de las mujeres, que son las que más tiempo se tardan en excitarse y en llegar al clímax.